Mi
demonio
(Belial)
Rostro
inescrutable, ¡maldita maldición!
¿Cuánto tiempo se necesita para crecer?
¿Qué es eso de conocerse a sí mismo?
Un dragón no sabe las respuestas.
Drako quiere hablar.
¿Cuánto tiempo se necesita para crecer?
¿Qué es eso de conocerse a sí mismo?
Un dragón no sabe las respuestas.
Drako quiere hablar.
Siempre evito las crisis, prefiero resolverlo antes de que llegue a un punto que me pueda tumbar.
Alguien me
dijo que no era bueno eso de madurar, porque lo que continua es
podrirse. No lo creo, considero que lo que le sigue a lo maduro, es
que se lo coman, esto quiere decir que si no es comido entonces es
algo desperdiciado, por lo tanto lo maduro es lo que da energías, lo
que sirve, lo que "funciona". Ni lo in-maduro, ni lo
pos-maduro sirve.
Entonces
entramos a una idea de que nosotros servimos sólo si en lo que somos
nos aprovechan.
Pero ¿cómo
lograr llegar a este punto?
Construcción
personal.
Movilizándonos
en nuestro querer ser para encontrar la ruta que vamos a seguir.
Ciertamente
esto conlleva a una idea de auto-dirigirnos a un idealismo creado por
nosotros mismos.
Para
autoabastecernos, el medio ambiente en el que nos movemos es
importante, pero no sólo eso, sino la literatura, el arte, la
realidad escrita, los diferentes puntos de vista. La historia.
Todo esto
nos lleva a pensar en que al tener una forma de ser construida por
nosotros se elabora una moralidad en la que nos movemos, dicha
moralidad va a ser parte de nuestra lógica de pensamiento, la lógica
en la que nos movemos y actuamos.
Aquí hay
que poner atención, puesto que la mía tiene que ver con la idea de
ser maduro para servir a los demás, la idea de crecer para después
proyectarlo sin necesidad de pensar que eso debe de ser la idea que
todos adopten.
Mi camino
es la Revolución Fantástica, el implementar un pseudónimo que
resalte lo que quiero resaltar. Lo que quiero hilvanar, lo que voy a
integrar después de una desintegración premeditada.
Al tener
una lógica de pensamiento de acuerdo al ser que soy, al yo
participante de la acción, y al yo que participó en la acción,
como ente que existió y que por lo tanto existe, puedo cerrar los
ojos y pisar terreno sinuoso a sabiendas de que a pesar de las cosas
terribles que puedan pasar, voy hacia mi objetivo, hacia mi ideal.
La idea de
Lois del ser humano adoptada por mí, tiene que ver con el deseo de
no lastimar al otro; la idea de Lestat ante el humano es dejarlo
libre y ver hasta donde puedo llegar y hacer lo que uno quiere de
acuerdo a lo que acepta, dudar y protestar (a pesar de que mi voz la
callo yo mismo); la idea de Armand es el verme bajo una moralidad y
sólo en esa moverme, esa que puede ser cambiada y a la que mi
moralidad se adaptará; la idea de Marius, el ver la hermosura y el
respeto a los demás; la idea de Gabrielle, la hermosura de la
naturaleza; Pandora, belleza en lo que puedo destruir, el amor ante
todo; Maharet, cuidar lo que es mío, para que trascienda.
Interminables
conexiones nerviosas que nos llevan a construir y a ser.
Y es que
no puedo aceptar las cosas sólo porque me las digan, las necesito
pasar por un filtro personal para adaptarlas o comprenderlas.
Si vemos a
los demás en su lógica de pensamiento, veremos que lo que hacen va
de acuerdo a una moralidad, a una idea de como debieran ser las
cosas.
Ver la
lógica de pensamiento nos conlleva a poder aceptar y respetar al
otro.
Mi bronca
es que muchas veces no lo tolero, me quedo en la frase de
"comprenderlo todo no quiere decir perdonarlo todo".
Pero la
ruta está trazada, la tolerancia la construyo después de la
aceptación y el respeto.
Al fin y
al cabo, termino siendo como Lestat.
Quiero que
me digan lo que soy, lo que ven de mí, porque eso quiero ser, me
hace ser tan yo: "Soy
un perfecto diablo. Dime lo malo que soy. ¡Me hace sentir tan
bueno!" (Lestat a Lois, en "La reina de los condenados",
Anne Rice).
Revolución
Fantástica
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